Durante las primeras fracciones de segundo el universo era tan pequeño y denso que para poder estudiarlo es necesario desarrollar una teoría cuántica de la gravedad.
La gravedad es la interacción dominante porque se trata de un objeto con mucha masa (en este caso, toda la masa del universo), sin embargo, toda esta masa y energía está encerrada en un punto no más grande que una partícula elemental, por lo tanto es un sistema cuántico.
Aún no se ha desarrollado esa teoría pero se han logrado encontrar algunas aproximaciones que son consistentes con la teoría cuántica. Cabe aclarar que hay varias teorías que tratan de explicar esto, obviamente con diferentes puntos de vista.
Según estos modelos, del vacío pueden aparecer estados de materia de forma espontánea.
Espacio y tiempo son conceptos que no tienen sentido antes de la aparición de la materia en el universo.
El espacio y el tiempo aparecen con la materia al momento del big-bang.
Que el universo entero haya aparecido del vacío (o de la "nada") va en contra de la razón y por eso es difícil de comprender. La lógica con la que nuestra mente se relaciona con el mundo exterior y construye modelos del mismo, está construida sobre la base de experiencias con el mundo macroscópico y no con el mundo microscópico subnuclear.
Es por esta razón que queremos someter todos los procesos a un modelo sencillo de 'causa-efecto', y lo que se aparta de ese modelo muy difícilmente lo podemos entender. El sujeto se separa del objeto para tratar de estudiarlo, y solo percibe un aspecto limitado de la totalidad. Desafortunadamente el modelo 'causa-efecto' no sirve para explicar el comportamiento de la materia a nivel subnuclear.
En sistemas cuánticos es posible por ejemplo que un objeto esté simultáneamente en varios lugares, o que un objeto salte de un lugar a otro sin 'pasar' por los puntos intermedios (por ejemplo: efecto túnel cuántico). Este tipo de situaciones no se ajustan al modelo 'causa-efecto' y no tienen equivalente alguno con procesos a escala humana.
Preguntar qué había antes del big-bang es equivalente a preguntar qué hay más allá del borde del universo. ¿Existe un 'espacio' dentro del cual se está expandiendo el universo?
La respuesta igualmente va en contra de la lógica: es el espacio mismo el que se está expandiendo en el big-bang.
Pero podemos llevar esto más lejos (o más cerca) y hacernos otra pregunta: ¿Qué había antes de que naciéramos? ¿Nada?, si es así, ¿de donde surgimos y de que manera?.
Sabemos que somos el resultado de la unión de 2 células que se encuentran y se transforman para dar origen a la célula huevo o cigoto, que en sí misma contiene la capacidad y la tecnología para formar un ser humano completo, que un día creará y materializará su propia historia. crecerá, tendrá hijos (que a su vez harán su historia) y finalmente desaparecerá.
Esto es algo misterioso.
Se ha descubierto que lo que llamamos espacio vacío, el "vacío", en realidad está repleto de inmensa energía potencial. La conclusión convencional es considerar al espacio como la nada, simplemente el lugar donde se sitúa la materia, lo hacemos nuestro espacio y como nos movemos en él creemos que esta vacío.
Pero el vacío tiene más energía que la materia que está en ese vacío y de hecho, la materia y el vacío son una misma cosa, hay una continuidad.
Se ha descubierto que hay más energía en un centímetro cúbico de vacío que en todo el universo manifiesto.
Un buen descubrimiento ciertamente, solo que no se nota, parece invisible.
Cada punto en el vacío tiene energía infinita convergiendo en ese punto. Debido a que la energía está proviniendo simultáneamente de todas direcciones, entonces hay un momento de cancelación, las líneas de fuerza, los vectores, se cancelan mutuamente y es por eso que esta cantidad de energía en el espacio es invisible, o no manifestada.
Es una energía universal que se cancela a sí misma omnidireccionalmente (en todas las direcciones). Este proceso de cancelación omnidireccional es tan perfecto que incluso una cantidad infinita de energía parece oculta en el espacio vacío.
Ahora, esto de que el espacio esté infinitamente lleno de energía, tiene inmensas implicaciones en cuanto a nuestra manera de ver el universo.
Desde este punto de vista cada punto en el cual hay total vacío es donde la energía se está cancelando de manera perfecta. Pero si en cualquier punto el proceso de cancelación omnidireccional no se completa, si hay un pequeño desequilibrio o disbalance en el proceso de balance energético (un vector sale un poco más), entonces ahí hay una distorsión en este punto y es esta distorsión en la cancelación lo que resulta manifestarse como materia.
Cada punto en el vacío tiene energía infinita convergiendo en ese punto. Debido a que la energía está proviniendo simultáneamente de todas direcciones, entonces hay un momento de cancelación, las líneas de fuerza, los vectores, se cancelan mutuamente y es por eso que esta cantidad de energía en el espacio es invisible, o no manifestada.
Es una energía universal que se cancela a sí misma omnidireccionalmente (en todas las direcciones). Este proceso de cancelación omnidireccional es tan perfecto que incluso una cantidad infinita de energía parece oculta en el espacio vacío.
Ahora, esto de que el espacio esté infinitamente lleno de energía, tiene inmensas implicaciones en cuanto a nuestra manera de ver el universo.
Desde este punto de vista cada punto en el cual hay total vacío es donde la energía se está cancelando de manera perfecta. Pero si en cualquier punto el proceso de cancelación omnidireccional no se completa, si hay un pequeño desequilibrio o disbalance en el proceso de balance energético (un vector sale un poco más), entonces ahí hay una distorsión en este punto y es esta distorsión en la cancelación lo que resulta manifestarse como materia.
Desde este punto de vista toda la materia, todo el universo manifiesto, no es más que una temporal asimetría en el vacío que se cancela.
El tiempo del universo que conocemos empezó con el big bang, al igual que el tiempo de nuestras vidas comenzó con la misma fecundación del óvulo. Sin el óvulo y sin el espermatozoide no sería posible nacer, esto indica que al mismo tiempo hay una continuidad, hay algo en nosotros que nos precede: los materiales que nos forman, la información genética, la energía, el espíritu, el deseo de encarnarnos, de vivir….
Si estamos hechos a imagen y semejanza del universo, el universo está hecho a imagen y semejanza nuestra.
¿Porque su origen sería tan diferente que el nuestro, o el de una estrella, o una libélula?
Si todo surge de la misma fuente: el vacío creador.
Por otra parte, este universo que según la ciencia a partir de sus cálculos y observaciones, se expande, obviamente también se contrae. Si tenemos en cuenta la naturaleza bipolar de la creación (ver: Yin y Yang).
Preguntar que había antes del big bang, no es diferente de preguntarnos de donde salimos. ¿En que momento esa masa indiferenciada de células comienza a tener conciencia de si mismo?
¿Cuál es la sustancia última de la que estamos hechos?
¿De que está hecho el universo?
¿Cuál es su esencia fundamental?
Esta verdad no puede conocerse solo con el intelecto, es necesaria la experiencia subjetiva, la meditación, penetrar en el vacío interior, para percibir su verdadera naturaleza, más allá de las categorías y conceptos. Por eso la ciencia, aunque su aporte es fundamental, nunca podrá conocer que hay detrás del horizonte de sucesos, que hay más allá de los límites de lo visible.
El tiempo del universo que conocemos empezó con el big bang, al igual que el tiempo de nuestras vidas comenzó con la misma fecundación del óvulo. Sin el óvulo y sin el espermatozoide no sería posible nacer, esto indica que al mismo tiempo hay una continuidad, hay algo en nosotros que nos precede: los materiales que nos forman, la información genética, la energía, el espíritu, el deseo de encarnarnos, de vivir….
Si estamos hechos a imagen y semejanza del universo, el universo está hecho a imagen y semejanza nuestra.
¿Porque su origen sería tan diferente que el nuestro, o el de una estrella, o una libélula?
Si todo surge de la misma fuente: el vacío creador.
Por otra parte, este universo que según la ciencia a partir de sus cálculos y observaciones, se expande, obviamente también se contrae. Si tenemos en cuenta la naturaleza bipolar de la creación (ver: Yin y Yang).
Preguntar que había antes del big bang, no es diferente de preguntarnos de donde salimos. ¿En que momento esa masa indiferenciada de células comienza a tener conciencia de si mismo?
¿Cuál es la sustancia última de la que estamos hechos?
¿De que está hecho el universo?
¿Cuál es su esencia fundamental?
Esta verdad no puede conocerse solo con el intelecto, es necesaria la experiencia subjetiva, la meditación, penetrar en el vacío interior, para percibir su verdadera naturaleza, más allá de las categorías y conceptos. Por eso la ciencia, aunque su aporte es fundamental, nunca podrá conocer que hay detrás del horizonte de sucesos, que hay más allá de los límites de lo visible.
El universo, las galaxias, las estrellas, planetas, células, átomos, partículas, son manifestaciones surgidas de la misma fuente. La fuente es el espíritu. La conciencia. El océano de potencialidad infiníta.
El universo al igual que todo lo creado, tiene una parte visible y otra invisible, que corresponden a niveles de organización, dicho de otra forma: a planos de la existencia. Diferentes planos vibracionales. Una parte que nace, muere, se transforma y otra, esencial, que ni nace ni muere, ni se deteriora, es infinita e inalterable. Es la conciencia.
¿Que había antes del big bang?
Conciencia
El universo al igual que todo lo creado, tiene una parte visible y otra invisible, que corresponden a niveles de organización, dicho de otra forma: a planos de la existencia. Diferentes planos vibracionales. Una parte que nace, muere, se transforma y otra, esencial, que ni nace ni muere, ni se deteriora, es infinita e inalterable. Es la conciencia.
¿Que había antes del big bang?
Conciencia